El 4 de noviembre de 2016, se declara Bien de Interés Cultural Inmaterial las actividades tradicionales de la Albufera de Valencia: la pesca artesanal y la navegación a vela latina.

El alcance y la diversidad que ofrece la Albufera hace que se creen estructuras materiales, artefactos y, en general, prácticas tradicionales, de aprovechamiento y explotación de los recursos que provee. Cómo en el caso de la pesca o de la navegación a vela latina, se trata de técnicas, usos y costumbres que son el resultado de una evolución de siglos.

El rico patrimonio cultural que surge de esta relación inveterada entre el medio y el hombre merece ser atendido y conservado, máximamente cuando, por un lado, muchas de estas prácticas son ejemplo de sostenibilidad, esenciales y todo para la conservación de la diversidad biológica y, por otro lado, están amenazadas de desaparición.

La pesca es la actividad tradicional más antigua de la Albufera de Valencia, porque ya Jaime I después de la reconquista, y de reservarse la zona húmeda para su patrimonio, establece en un privilegio de 1250 que «puedan pescar en la Albufera de Valencia cualquier vecino o habitante de la ciudad o Reino de Valencia y cualquier extraño también, y coger peces, y no tener que dar a Nós ni a los nuestros nunca de estos pesces, sino sólo la quinta parte franca». Su interés proviene de su larga tradición, de su adaptación al medio, de su identificación secular con la sociedad donde se desarrolla, de sus antiguas estructuras organizativas, de sus artes, de su lenguaje, de sus símbolos propios…

Por otro lado, la vela latina es una de las formas tradicionales de navegación común en todo el Mediterráneo, con una incidencia considerable en las tierras valencianas, y particularmente a la Albufera, donde desde antiguo ha sido utilizada como un medio de transporte vinculado a la explotación de los recursos naturales, como la pesca y la agricultura, y las funciones de la cual en la actualidad se relacionan con formas de ocio asociadas al ámbito cultural y lúdico. Además, la vela latina ocupa un lugar por derecho propio en la imaginería identitaria del pueblo valenciano, y al suyo cercando hay una serie de elementos materiales e inmateriales constitutivos de la cultura tradicional valenciana que merecen ser protegidos para así garantizar el legado a las generaciones futuras.