Antigua Lonja de Pescadores

Situada frente a la playa de la Malvarosa, lugar al que tradicionalmente llegaban las pequeñas embarcaciones de pesca.

Se pretendía que el espacio fuera grande para dar cabida y unificar el intercambio de las mercancías. Se trata de un edificio alargado con dos entradas monumentalizadas, que hoy dan a las calles Columbretes y Pescadores.

Las paredes de este espacio central, de baldosa cara vista como el resto de la construcción, se articula con sencillas pilastras del mismo material que los muros y con dos ventanas, arriba y abajo.

Estas ventanas, como las del exterior, parecen las originales. Las pilastras citadas están remates con un pequeño arquitrabe moldurado con baldosa que sostiene una armadura de madera para sostener el amplio sustentamiento interior, con tejas planas con cierto parecido al flamenco.

En la parte exterior las puertas están escalonadas con frontón mixtilíneo pero sencillo con ojo de buey. Los dos pisos del resto de la fachada así cubierta con un arco de medio con imitación de tipo adovelada y sillares alrededor de la puerta, empleando baldosas. Las otras cuatro puertas son mucho más parecidas y más estrechas que las laterales, las que dan en las calles Hombres del Mar y Eugenia Viñes. En el resto de la fachada la única decoración es un friso moldurado en la parte de la cumbre.

La función de punto de venta de pescado se mantuvo hasta la Guerra Civil, después de la cual se convirtió en prisión, antes de la construcción del Nuevo Palco, en uno de los muelles de la Dársena Interior del Puerto de Valencia.
Posteriormente el espacio habitable se convirtió en viviendas particulares para un total de 41 propietarios, que ocupan dos plantas. Anteriormente estas viviendas habían sido para pescadores, los cuales habían utilizado el patio interior para sus fines propios.