Inauguración de la exposición «Herencias. Las alquerías de la huerta de València», una muestra dedicada al mundo de las alquerías del extrarradio de València, lugar históricamente destinado a la huerta y el ganado.
Paloma Berrocal comisaria esta exposición centrada en estos emblemas de un modo de vida tradicional relacionado con la economía agraria, que fueron más que meras viviendas llegando a constituir, junto con las barracas, los edificios más emblemáticos de un paisaje cultural centenario.
Seguro que os habéis imaginado cómo se vivía en otras épocas, cómo eran las casas, qué comían y a qué jugaban… A través de la visita a la exposición «Herencias. Las alquerías de la huerta de Valencia», descubriremos objetos y hallazgos que nos ayudarán a recrear esas vidas pasadas, mientras que la bodega del s. XV nos permitirá pasear por una verdadera cápsula del tiempo.
Y, ¿habéis pensado cómo se imaginarán en el futuro vuestras vidas? ¿Qué les contaríais? ¿Qué queréis convertir en recuerdo? Os proponemos construir vuestra propia cápsula en la que meteremos todo aquello que queramos preservar para el futuro y aquellas cosas por las que queremos que se nos recuerde.
¿Cuál es el proceso de trabajo de los fotógrafos detrás de las obras de «La mirada de las cosas»? En este taller queremos conocerlo a través del experimento y lo haremos mediante de esas imágenes que guardamos pero que consideramos descartes.
Haremos un paralelismo con la explicitación que hace Moriyama al mostrar sus carretes, aquellos que contienen las fotografías que no salieron a la luz. Indagaremos sobre la idea del proceso, de lo que no consideramos y de lo que se queda fuera de nuestra selección, del error hecho prueba.
Nuestra galería del móvil es testigo de lo que pasó de largo y que ahora nos paramos a mirar detenidamente, modificando el tiempo de las imágenes en ráfaga. Proponemos pinear en superficie estática o líquida esta colección de imágenes que nos hablan de nuestros tiempos pixelados.
En esta visita guiada diseñada por Laura Pastor partiremos de las «miradas de las cosas» vividas, contadas, transmitidas. A partir de los conceptos que la Escuela Mono-ha investigaba: la materialidad de las cosas, los tiempos y los espacios que las rodean y nuestra relación con ellas. Durante la visita habrá ejercicios, visualizaciones y escuchas que nos permitirán conocer la reinterpretación, desde el presente, de las propias obras de Enokura Koji, uno de los miembros de esta Escuela de las cosas (Mono-ha).
«De carne y hueso, de sangre que recorre arriba y abajo nuestro cuerpo atravesamos las puertas de madera, de metal, de aceite que hace girar las juntas. La tela que ahora es piel, la pintura que ahora es superficie, todas juntas hacen ahora un reflejo conjunto que no nos permite vernos sino entrar a ser aquel animal erguido envuelto de la tiza blanca de las paredes de la fábrica, hoy con otros tintes.
Nuestra suela está marcada por el cemento, el mismo que sufrió la huella circular de aquella maquinaria que le dio forma.
-«Voy hacia ti», dice tu mano sobre el listón de madera que ya no se puede mover, fijado desde los 90 sobre el lienzo con su sombra pictórica, y que aquella desea extraer.
Tu mano y el listón.
La Escuela de las Cosas, la Escuela Mono-ha.
Tomando como inspiración esta Escuela de las cosas (Mono-ha) os proponemos reflexionar sobre la materialidad de los cuerpos que nos rodean y de los que somos parte, de los que les rodeaban y de los que eran parte. Nos aproximaremos a las obras desde nuestro presente a través de referencias visuales, sonoras, objetuales y corporales.
Nuestros vínculos son absorbidos por las cosas. Las cosas ahora están afectadas y pueden ser afectos. Pero… ¿Dónde están las cosas?»
Laura Pastor
«Esta conferencia analizará la dimensión narrativa de las imágenes, tanto en su circulación mediática como en el contexto artístico. A su vez, veremos el carácter igualmente narratológico de muchas de las prácticas artísticas contemporáneas a partir de algunos casos de estudio dentro de la colección Per Amor a l’Art. Todo ello tiene su origen en un vínculo ancestral entre los actos de representar y relatar. La capacidad para donar sentido a las cosas o a las imágenes tiene una naturaleza híbrida entre la recepción visual y la construcción lingüística. En ello residirá una significativa relación entre arte y literatura que se potencia en las tendencias más actuales. Estas dimensiones serán tomadas también como génesis de los relatos historiográficos más influyentes, así como de las estrategias de comisariado que pueden reconocerse en las exposiciones como formato habitual de recepción de las obras», Víctor del Río.
Actividad en el marco del taller (En) Proceso con Víctor del Río. Ensayo de una exposición, que se desarrollará de octubre a diciembre de 2019.
Víctor Del Río es investigador y ensayista, autor entre otras obras de los libros: La pieza huérfana (Consonni, 2015); La querella oculta. Jeff Wall y la crítica de la neovanguardia (El Desvelo, 2012); Factografía. Vanguardia y comunicación de masas (Abada, 2010) o Fotografía objeto. La superación de la estética del documento (Ediciones Universidad de Salamanca, 2008). Colaborador habitual de medios especializados en arte y cultura visual, ha dirigido como gestor y curador diversos proyectos para instituciones museísticas y centros de arte. Ha sido conservador jefe del Museo Patio Herreriano de Valladolid y es profesor de Teoría del Arte en la Universidad de Salamanca, así como en el Máster en Fotografía, Arte y Técnica de la Universitat Politècnica de València.
El trabajo de Mette Edvardsen se sitúa en el ámbito de la performance, como coreógrafa y performer. Aunque algunos de sus proyectos exploran otros medios y formatos, como el vídeo, los libros y la escritura, sostiene el interés en la relación que éstos mantienen con las artes performativas como práctica. Afincada en Bruselas desde 1996, ha trabajado durante años como bailarina y performer para multitud de compañías y proyectos, y ha desarrollado los suyos propios desde 2002.
«En los últimos años ha habido retorno al lenguaje en las prácticas estéticas y, en la danza y las disciplinas coreográficas, lenguaje, texto y escritura se han desarrollado de diferentes maneras dentro de nuestras formas de manifestación artística. Estoy interesada en el lenguaje y la escritura como parte de mi práctica artística, en la que la escritura es inherente al proceso, afectándolo desde dentro. Si hablamos de la coreografía, no estoy interesada en el lenguaje, el texto y la escritura como herramienta hacia otra disciplina o forma artística (teatro, literatura), sino como parte de mi propio campo de actuación (danza y coreografía). Trabajo con el lenguaje como material. Estoy interesada en cómo la realidad existe en el lenguaje y cómo se extiende al espacio real. Uso el lenguaje para crear espacios imaginarios y coreografías, y estoy interesada en cómo el lenguaje hablado relaciona el cuerpo con el espacio.
Compartiré materiales de diferentes trabajos que usaremos como punto de partida para pensar y hacer cosas en grupo».
Mette Edvardsen
Con proyección internacional, lleva a cabo proyectos con otros artistas, como colaboradora o como performer. En 2015, en Oslo, se presentó una retrospectiva de su trabajo en el teatro Black Box. Edvardsen tiene el apoyo de Norsk Kulturråd (2017 -2020), BUDA Arts Centre Kortrijk (2017 – 2020) y apap-Performing Europe 2020, un proyecto cofinanciado por el programa de la Unión Europea “Europa Creativa”. Actualmente investiga en la Academia Nacional de las Artes de Oslo y es artista asociada en el teatro Black Box de Oslo. En 2019-2021 forma parte como artista del centro coreográfico nacional de Caen (Normandía, Francia).
La Gran Fira de València cierra su programa de actividades con la Batalla de Flores. Introducida en 1891 por iniciativa de Pasqual Frígola, barón de Cortes de Pallás, empezó a celebrarse en el paseo de la Alameda, a imitación de unos combates lúdicos semejantes que se celebraban con gran esplendor en Niza, en la Costa Azul, durante sus fiestas del Carnaval, y que después también se exportarían a otras ciudades europeas y españolas.
Rápidamente, la Batalla de Flores se convirtió en el festejo más distinguido y a la vez popular de la Gran Fira, y se configuró como un gran evento social y espectáculo para el conjunto de la ciudad. De hecho, la Batalla de Flores se mantuvo como uno de los principales actos festivos y sociales de la era dorada de la antigua Fira, que transcurre entre finales del siglo XIX y el primer tercio del siglo XX.
La Batalla de Flores se abre con un cortejo encabezado por la Policía Municipal de gala y a caballo. Después, empieza la cabalgata valenciana, que consta de música de tabal y dulzaina, seguida de portadores de joyas y pomells y de las parejas a caballo ataviadas con vestidos a la antigua.
A continuación, empieza el desfile de las carrozas y los coches ligeros. Después de una segunda vuelta en que se entregan los premios a las mejores carrozas y coches, se dispara una carcasa anunciadora. Es en ese momento cuando de verdad empieza la Batalla de Flores, consistente en el intercambio de clavellones como si fuesen proyectiles entre las carrozas, los coches y el público. Este año, serán lanzados millón y medio de clavellones, hasta que la disparada de una segunda carcasa anuncie que se ha acabado la lucha.
A pesar de que la Gran Fira de València ha experimentado fases de decadencia y reestructuración, en las últimas décadas la Batalla de Flores ha conservado su preeminencia dentro de la Fira, porque, además de clausurarla, ha mantenido vivo buena parte de su antiguo espíritu popular. Es así como la Batalla de Flores ha sabido combinar la tradición ferial, el arraigo valenciano y la disposición al cambio, hecho que ha posibilitado que se conserve como el patrimonio festivo que es
Consulta la programación de las actividades de la Gran Fira de València 2019
El verano nos invita siempre a trasladar la vida a la calle, donde podemos reencontrarnos con vecinos y amigos o también acoger a aquellas personas que nos visitan. No hay mejor manera de hacerlo que con la Gran Fira de València, una Fira que dentro de dos años celebrará su 150 cumpleaños, pero que se mantiene con tanta fuerza como el primer día.
Además de los ya habituales espacios de los Concerts de Vivers y los Jardines del Palau, en estos últimos años la Fira se ha hecho más grande que nunca extendiéndose por todos los rincones de la ciudad con esa Correfira que recorre los barrios y pueblos de València. Y también ha crecido con las cuatro noches que, cada fin de semana, articulan buena parte de las actividades: las Nits de Folk, que nos conectan con las músicas tradicionales y nuestro patrimonio festivo; la Nit a la Mar, con su oferta de conciertos al lado del Mediterráneo; la Gran Nit, que llena de fiesta y cultura el centro histórico, y la Nit de la Punxà, que preludia la Batalla de Flors, un combate pacífico que marca el fin de la Gran Fira. Todo, sazonado con las diversas modalidades pirotécnicas que componen el ciclo de los Focs de la Fira.
Pero la Fira también se ha hecho grande gracias a la colaboración entre instituciones, coordinando actividades y sumando esfuerzos a la hora de ofrecer la programación más completa a la ciudadanía. Todo ello nos permite presentar una oferta amplia y diversa, dirigida a todo tipo de público, que combina propuestas más específicas con otras de carácter más general. Un programa que, un año más, convertirá nuestra ciudad en el escenario al aire libre para un gran festival urbano, donde la música, el teatro, la pirotecnia, el cine o la gastronomía refrescarán las tardes y noches del verano.
Junto a los dos ninots indultats 2019, habrá unos paneles explicativos con información sobre las Fallas, el Museo Fallero y el Indulto del Fuego, además de información específica sobre los Ninots Indultat. Además, por primera vez, se mostrarán unos paneles con los proyectos de las fallas municipales de 2020.
Taller de lectura teatralizada del texto propuesto con ejercicios previos de voz y expresión.
Taller multidisciplinar de crecimiento interior para mujeres en base a la lectura y la posterior integración de los contenidos con la meditación, ejercicios corporales y danza
La obra de Isidro López-Aparicio, íntimamente ligada al compromiso humano y al activismo social, parte de procesos integrados en lo colectivo. Su amplia trayectoria como profesional de la cooperación en entornos de conflicto ha modulado la irreductible dimensión ética de sus propuestas artísticas. Las obras que se despliegan en esta exposición no son el mero resultado de su acción sobre distintos objetos; todas ellas responden a una entrada directa en escena, implicándose de lleno en la realidad y con el firme asidero del respeto hacia el «ecosistema humano» con el que establece el diálogo.
Desfile Colección migrante
«Colección migrante» es un desfile de moda; también es una acción artística; pero, sobre todo, es una invitación a pensar de manera crítica en el auge de los discursos xenófobos, en los dispositivos represivos y en las políticas públicas que, ante las crecientes migraciones transnacionales y la actual emergencia de refugio, se quedan instaladas en la epidermis humanitaria.
