Las obras de rehabilitación del refugio antiaéreo de Massarrojos «avanzan a buen ritmo y está previsto que finalicen a finales del mes de junio”, tal y como ha indicado la concejala de Patrimonio y Recursos Culturales, Glòria Tello, en la visita al refugio. Esta intervención tiene una inversión de 205.625 euros y “sacará a la luz después de 81 años esta obra civil excavada en la roca debajo del pueblo de Massarrojos, que forma parte de nuestra historia y nuestro patrimonio”, ha dicho Tello.
El refugio de Massarrojos fue construido en los últimos momentos de la Guerra Civil, excavado directamente en el subsuelo rocoso, como protección de los vecinos ante los ataques aéreos del bando rebelde. Durante décadas permaneció oculto en el subsuelo e incluso se tapiaron los accesos.
En octubre de 2016 se redescubrió de manera fortuita. Se tenían referencias sobre su existencia por vecinos y vecinas de la población, pero se desconocía el estado de conservación, así como la localización exacta de sus entradas, ya que fueron cegadas en los años 50 del siglo pasado y no quedó ningún resto visible.
El refugio está conformado por un pasillo alargado de 125 metros con una anchura media de dos metros y se accede a él a través de dos entradas con escaleras, una desde la plaza de El Soñador y la otra desde la calle Benet Bosch. Las paredes están lucidas y llevan adosado un banco corrido. Aunque estaba preparado para acoger el sistema de ventilación, la maquinaria nunca fue instalada.
“Las obras de rehabilitación y puesta en valor conllevan la instalación de alumbrado y ventilación en la sala subterránea, reposición de elementos desprendidos, restauración de bancos, tratamiento de paredes y suelo y la construcción de dos accesos desde la vía pública, debidamente señalizados”, ha explicado Tello.
La intervención se completará con paneles informativos que explicarán las características de la construcción y detalles de la Guerra Civil en Massarrojos. Se trata del único refugio recuperado en un pueblo de València ciudad. En el centro de la ciudad sí se han puesto en valor dos, el refugio escolar de la Casa Consistorial y el de la calle Serranos, rehabilitándolos y haciéndolos visitables para la ciudadanía.
“El refugio de Massarrojos tipológicamente es una construcción singular por estar excavado en la roca, y no construido con hormigón, como fue la norma habitual y como ocurre en los del centro de València. La razón es que en Massarrojos se desarrolló una importante actividad derivada de las canteras”, ha detallado Tello.
En 2017 se realizó una primera intervención a cargo de la Sección de Investigación Arqueológica Municipal (SIAM), en la que se desescombró el conjunto, se hizo el levantamiento planimétrico con fotogrametría por escáner 3D, y el estudio arqueológico, recuperando proyectiles, objetos personales y algunos utensilios empleados por las personas que, a veces, tenían que estar largos ratos en el interior del refugio.
El estudio arqueológico llevado a cabo en 2017 ha servido de base documental para redactar el proyecto de restauración y puesta en valor que ahora está ejecutándose.